Por ejemplo en el caso de los vicios, el intento de cambiar o dejar puede tener éxito. Al fin y al cabo son los cambios en el área personal los que se pueden realizar más fácil que los otros que dependen de otras personas.
Perdimos el puesto de trabajo “normalmente” porque hemos estado demasiado tiempo de baja por una fase depresiva o porque hemos tenido la una fase maníaca o hipomaníaca en que decidimos dedicar nuestro tiempo a otras asuntos que nos parecen más importantes. Pues en mi caso ha sido un accidente de trabajo forzado por parte de mis superiores. Es que me pusieron en un puesto no adaptado a mi discapacidad física. La consecuencia era que después de unos meses en ese puesto no aguantaba más esos dolores y acudí a la mutua de la empresa. En fin me han tenido que operar y la seguridad social me propuso una pensión por incapacidad permanente total para el puesto de trabajo habitual. Estoy buscando un nuevo empleo mientras sigo con los “interminables” juicios para conseguir que me pagan que me corresponde.
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