Vivir en armonía con su entorno privado y laboral es un objetivo para muchos y para gente con la enfermedad bipolar aun más. Me recuerdo a una serie de televisión y su canción de comienzo en inglés: “Living in harmony...”, siempre me gustaba, antes de saber que tengo la enfermedad de las emociones. El estrés es malo para el estado de salud de cualquier persona y supongo que los enfermos mentales aguantan menos todavía.
Cuando llegamos a un punto de tratamiento satisfactorio, sin sufrir más de fuertes cambios del estado de ánimo, tendremos que buscar la normalidad y una vida con menos estrés posible. Mantener un estilo de vida tranquilo y las horas de sueño cada noche. Así disminuye la probabilidad de recaídas.
Darse paseos a diario, ejercer algún deporte con regularidad es gratificante y favorece el sentirse bien.
El sedentarismo, los efectos secundarios de los psicofarmacos y la ingestión diaria de más calorías que necesarias, dan resultados no deseados.
Verdaderamente cuesta mucho tener la disciplina de estructurase el día y reducir esas malas costumbres que nos han dominado varios años. A lo mejor exagero algo, pero la dejadez es un aliado malo para las personas y más para bipolares.
¿Quién tiene suficiente fuerza de voluntad de cambiar sus hábitos?
me alegra saber de ti,
ResponderEliminarhoy es la primera vez que entro,le hechare un vistazo con tu permiso,
muakssssss amigo virtual